Este relajante tema tiene sus momentos para escucharlo, tendido en la arena de una bonita playa o a bordo en un lujoso yate, por ejemplo. Desprende elegancia, suavidad al tacto, si bien la letra es algo triste. La vocalista nos arropa con su voz, nos protege con su suave textura. El tema es en sí sencillo; la pegadiza melodía, sin apenas variantes y con acordes repetidos, no cansa, a lo que ayuda esa agradable variación electroclash en el tercer minuto. Os dejo en buena compañía, con Desire, un grupo reciente y con mucho talento.
R.O.C.
Gran canción, qué elegancia, qué melodía, qué arreglos, qué voz... Hipnótico y adictivo, con un tipo se sonido muy afín a lo que me suele gustar. Un diez.
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